lunes, 29 de agosto de 2011

Ardidez mía de mí

Sí, sí. A todos alguna vez nos han hecho crítica sobre algún trabajo, ya sea artístico como una pintura, un dibujo,   incluso sobre nuestra forma de cantar o de escribir, o del ámbito académico (alguna investigación...). 
Las razones: porque la situación lo requiere (concursos... jueces/maestros/gente que cree que sabe lo que hace), gente que quiere ayudarte a mejorar, o simplemente gente entrometida que da su opinión nada más porque sí.



Y me refiero a esos trabajos a los que les dedicamos tiempo, algo de esfuerzo y un toque de amor y vienen cargados con un poco de nuestro ego; independientemente de si es un trabajo de calidad o no, lo quieres porque es tuyo (si no lo sienten así pues déjenme, yo sí me encariño con mis mugrientas creaciones).

Bien, este es otra vaga introducción que me parece necesaria.


Creo que me considero una persona resentida con las críticas, lo que se podría decir en otros términos, una persona <<ardida>> y no sé porqué siempre está esa tendencia a negar cuando alguien nos llama así y justificarnos, como si ser una persona <<ardida>> te convirtiera en una especie de aberración mutante de ser humano. Y bueno, yo al menos lo acepto. Sí, soy una ardida y qué?

No tiene nada de malo, al contrario, a mí me parece que las personas cuando se ven <<ardidas>> y   responden algo egocéntrico o arrogante, pretenden  aparentar una actitud de seguridad, como si  tomaran con madurez esa crítica, y pues NO, eso a mí me dice que están ardidos y encima son lo suficientemente llorones como para hacerse los rudos. 

Bien, ahora vamos al punto de todo esto.

Así que este es el momento en el que me quejo y me... justifico? O explico porqué siento esa sensación de arbitrariedad con críticas recientes a alguna cosa que he hecho. 

Primer caso: Estaba yo en clase de biología, haciendo reportes de las actividades que habíamos hecho anteriormente, debíamos hacer un análisis del tema y blablabla.
Pues ahí voy yo, con mi pequeño análisis (el cual construí lo mejor que supe) para mostrárselo al profesor para ver si estaba bien.  Él miró el pequeño párrafo y ésta fue la conversación:

Profesor (anciano cara de gnomo): Dónde está el título y el objetivo que les pedí?
Yo: Está atrás.
Cara de gnomo: no me importa, dije que lo copiaran de nuevo cuando hicieran el análisis.
Yo: pero si ya lo puse atrás... (supongo que no me di a entender bien, pero quise decir que eso sería poner la misma información de manera repetida).
Gnomo:  sí, pero también tienes que ponerla aquí, si llegaras temprano sabrías lo que les dije a tus otros compañeros... (el maestro siempre que puede me echa en cara que soy una impuntual)

Después de darle a entender que yo no comprendía para qué debíamos ponerlo dos veces, prácticamente me dijo que lo pusiera repetido porque él dice. Cuando por fin se enfocó en el mugre párrafo que yo quería que me revisara, apenas llevó su mirada a mi texto y dijo con vehemencia "Esto no tiene coherencia"

Yo sólo pensé, de la manera más tranquila, sobre todo con compostura:  "No sea tarado y léalo primero!! 123wqaosdoasdlxc" <--- <<nótese la convulsión>>

Y efectivamente, el maestrucho no lo había leído, ya después lo leyó y me dio las observaciones "correctas", y digo "correctas" porque sólo era cuestión de invertir algunas oraciones para que "se viera mejor", al final el maestro ni me firmó el trabajo y bueno... realmente no me importa.

Este asuntillo sólo funciona si uno escribe enojado y ardido (de hecho esta entrada iba a tener segunda parte) y pues, ya no lo estoy, pero aún así mantengo lo que dije al principio de todo esto.


Para finalizar, siento que las personas que sirven de jueces para alguna cosa, deberían de fijarse más en el contenido y la esencia del trabajo presentado que en detalles técnicos (a menos que el concurso o lo que sea sea realmente profesional).


Nota:  Es el único maestro  <barco, poco exigente, fácil de manipular>  que tengo y es con el único que me llevo "mal"

jueves, 25 de agosto de 2011

Mañana estará nublado.

Haré como que no te veo de azul frente a mí con cara de recuerdo, de espejismo. 

Haré como que no veo esa ventana que me hace mirar tus manos, que no evoque esa conciencia de saber que no han tomado las mías. 

Haré como que no he visto nacer tantos días después de haberme perdido en tantas noches, todas ellas sin luna y con sol. 

Haré como que no me doy cuenta de tu cualidad de movimiento, de la desfachatez de evadir.

Haré como que no me importa tu espacio, ni el mío, ni los choques eléctricos que los hacen coincidir.

Haré como que no veo tu manía de desear los "nuncas", de aparentar querer ver qué pasa, y de tu gusto desmedido por las flores lacias que te parecen hierba.

Haré como que no me doy cuenta de que volteas a ver el cielo, que hoy llueve, pero mañana estará nublado.

martes, 23 de agosto de 2011

Viento

Me dejé llevar por varias ventiscas, tentadoras corrientes de aire que me arrastraban sin importar cuanto quisiera imponerme, unas me tomaban de la mano amablemente, me empujaban inesperadamente hacia donde mis pies no podían tocar, me hacían danzar con el polvo de mis recuerdos incandescentes, vueltas y vueltas en el florecer de un éxtasis vacío, hasta que finalmente me soltaban, me contemplaban un poco y me dejaban caer…

Otras me ponían contra la pared y me oprimían el pecho, tan fuerte que sentí desfallecer;  se alimentaban de mi aliento, de mis suspiros, de todo aquello que dejara escapar; incluso robó la tímida sonrisa de aquel que espera con ojos sin brillo…

Por fin me encontraba libre de viento, cerré los ojos e intenté desaparecer, pero una sensación me recordó que aun estaba ahí, que aún existía, era otra ventisca que me recorría, se enredaba alrededor de mí, comenzaba a apretarse; me prepararé para recibir el primer golpe, sin embargo, este viento no me abofeteó, inimaginablemente, solo rozó suavemente mi rostro, no raspaba, era cálido y frágil... temí que solo fuera así para hacerme relajar y ser atacada por la espalda, pero no fue así, este viento no me llevo a ningún lado mas que al borde de la locura, me llevo a esperar a que este viento trajera consigo nubes grises que regalarían gotas cuyas caídas formarían una lúgubre canción...  
Me vió palidecer y se perdió en mi interno regocijo.

Comenzó a impregnarse en mi piel para convertirse en mi brisa eterna, se quedó con mi esencia para fusionarla con su naturaleza y pertenecerle, absorbiendo mi sombra para infectarme aun más, me elevé más allá de mis pensamientos y choqué contra las puntas afiladas de lo incierto, donde aun permanezco, paralizada, con los ojos cerrados otra vez, no quiero ver más.

Me pierdo a mi misma, logro desvanecerme, casi siento paz; momentáneamente esa herida se hace más profunda, me descubro a mi misma lacerándome, y en medio de cada punzada, todo vuelve a ser irreal, volteo y el viento sigue ahí, casi premia mi aversión, la engrandece, la oscurece…

Aleja de mí lo único que me queda, me sepulta bajo su grandeza, ahora sí me asfixia, no debí confiar, es tan sólo una corriente y no sé si quiero escapar, pero desde el fondo, indudablemente algo rasga la realidad, la rompe, la destruye…



Así fue


Esto lo escribí hace algún tiempo y lo subo nada más porque puedo hacerlo.


Hay cosas que aprendiste a dejar de esperar, pero hay otras más que no importa si están dentro de tus expectativas, simplemente las quieres de una forma frenética, imparable.
Ese deseo que tienes es tan simple, tan simple que no debería ser tu prioridad, pero al final, es lo único que te llena, lo que mejor te hace sentir.
Es difícil querer algo más después de haber probado el cielo, eso lo entiendes, pero también entiendes que no debería ser tan adictivo, sin embargo, a pesar de todo siempre llegan fugaces esos preciosos recuerdos, sacan una sonrisa en tu cara, sientes algo de paz en tu interior, pero ansiedad porque quieres volver, casi es enfermizo.
Paz, es la palabra prohibida, la que quisieras pronunciar, la que quisieras gritar cuando sea verdad, cuando todo sea verdad... Sería invaluable.
Por ahora solo sientes cansancio, aún ves destellos de todo, de lo que hay por hacer y de lo que quieres, de lo que descubres y de lo que quieres saber.
Poco a poco sigues conociendo todo, te surgen más dudas que nunca antes, te cuesta trabajo responder a tus preguntas, no puedes pensar bien, a veces resulta difícil diferenciar lo que es real y lo que no ¿Hasta qué grado es fingido?
Hay tantas cosas que podemos asumir, pero ¿por qué tendrían que ser reales? Darle seguridad a nuestras ideas, eso es…
¿Seguridad…? Unas palabras, algunos sentimientos, una fuerza… se degenera todo el tiempo.
Otra vez esos recuerdos, escarbas tanto en ellos, te revuelcas en el polvo de lo que son, simples rastros, rastros de que existe eso que tanto deseas, rastros de que lo has obtenido, ¡de que al fin es real! Por esa y por más razones importa tanto saber lo que significa ser real, verdadero…
Por más que las palabras puedan decir, siempre será así, difuso, incierto.


Es hora de utilizar lo que si se tiene, lo que está a la mano.

lunes, 22 de agosto de 2011

Escribir mientras te estás quedando dormida, 2

Acá va otra pieza de ese arte que es quedarse dormido (casi el sueño mismo).

Es que ésta es una pluma que no escribe, deja que salgan solas las cosas, luces moradas y rosas, se mueve, su cuerpo, no, no.

Quise nacer gato, pero no me dieron listón ni madeja y me enredé en el todo que hay en el silencio, me caigo de la silla, no quiero ser otra persona, extraterrestres que creen en extraterrestres, por eso yo siempre he sentido que los gigantes nos observan. Albóndiga de carne con salsa cassé, no me importa que tú hayas dejado de verlo; una pelota de playa, decir que te mueves lento.

Podríamos estar así todo el día, no dejes que la mariposa te diga lo que tienes que hacer, y mi dinero para panqueques y la silla roja no quiere; no me iré a ningún lado, el elefante tiene un overol azul y quiere cosechar el jardín. Aimobait*, yo no entro al cine Teresa,; lo vi suave pero no, hizo llorar a esperar a que llegue sin su bota, no hagas esas bromas, tío.
 Tú solo dile que no y que no hay descuento, ya se lo llevaron no te vayas porque hay que volver a ----, pero le gusta, no lo lleva aún, el cerrojo de ---- ahí con el calor y los que no quieren que vuelva.

Pues ellos también Thah---(?)* y se cae como el yoyó, y en la ventana las nubes me quieren decir algo porque mi pieza de pan, no corresponde, un 6... el tichel* de la bufanda roja, yo no dije eso pero con los, nos jala el hoyo negro porque el candelabro ya me hartó y quiero que deje de decir cosas tontas; hubo una sombra y me recuerda al grillito y a las ranas, las flores rechaconas*, se ve como dura? no. pero no puede creer que ella diga que no porque es hora de. Me reconocen y saben todas las del meme, no seas puta, pinches gabardina y sólo eso. Con la rapada te vas a cansar, el? esos cri, eso quieren y yo no puedo interrumpir con la cubeta y dile y dile que ella ---- ---- ---- me corren a la mesa, y así, es un mundo de artes, estaba gorda y le dijo que se fuera. La cuchara abraza porque es de plata pero ella es muda y no quiere. Cuidado con las plantas.


Acotaciones:
* palabras inventadas, jajajá, busqué en internet y "tichel"  casualmente es una especie de pashmina que se colocan en la cabeza las judías casadas, esa "prenda" va de acuerdo a un código de modestia o algo así.
* Aimobait en mi mente era un producto, como algo que sale en un infomercial.

domingo, 21 de agosto de 2011

Escribir mientras te estás quedando dormida, literalmente.

Escribir en un cuaderno mientras te estás quedando dormida para ver qué sale, eso hice. Donde salen "----" es que no pude descifrar qué rayos decía.

Estoy aquí, acá, sola y se me cierran los párpados, y mi pluma es de gel, se ve grueso, en el msn no hay nadie, tengo que recurrir a recordar y fastidiar algo? Meh, yo no creo que sea por eso existen y no los mueves acomodar a tu gusto hasta ver si al menos una vida; un gran señor tiene doctorado y pasó el mosquito puto en una maceta, estaba sentado y la pelotita gira y gira y quiero comer un pan de vainilla pastel, sigue dando vueltitas la pelotita y es muy fácil porque lo pueden hacer ellos. Mi otra mano los pondría de... azul al tipo no, no vamos a irnos, un sartén con jotcakes y en la caja de. Tengo sueño y una escuadra se burla de mi cuarto. Bien padre este personaje y se verá la cara desde ahí, nos vamos chuecos, así quiero el ---, a dormir. ---,----, te taclearon.

Es divertido que incluso semi dormida, coloqué varias tildes, en esta entrada lo escribí lo más correcto posible pero sin alterar el random de mi somnolencia,  como que escribí "jotcakes" en lugar de "hotcakes".