sábado, 8 de diciembre de 2012


El impulso tan sensual, y la letra tan invisible. Fuera respeto, muerte.
Te quiero pensar, ya cállame. Sí, sí sí, el silencio es mejor, la pasividad aniquiladora, no, gracias. Aquí en unos renglones nuevos, me gustas más, yo te amo, rayitas. LOL, nos comunicamos.

Vientecillos, entrecerramos los ojos, basurita hijueputa ataca porque ella tiene hambre (y no es la única). Intersecciones tan divertidas. La hora de la expresión ansiosa, de la sumisión de mi cara horizontal y los ojos muertos, como peces bien electrocutados.
Los extraño, pececitos.
Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Duelo Infinito.

Se nos acaban los rieles y aún así seguimos, aún así repetimos y yo hablo de la 1era persona en plural. Ya te incluyo, quien quiera que seas, rayitas.

No esperaba menos de ti, LOL. Esto ya está empezando, a cenar.

Una colina, una carretera, verticales, una encima de otra y el infinito en medio de ellas. ¿Ficha 46? Ficha 46! Y a mí me toca la puta 53.

Tengo aquí entre mis manos un pedazo de tela de movimiento.

Determinado, determinación.
Y y con mis pies descalzos y mis manos entintadas, el bichito que recorre todo y se deja apresurar. Lo tomas y vuela. Justo como vino, sólo que conmigo, nos encontramos, y adonde quiera que vayamos, cada uno, en su idioma y con su especie, relataremos a los demás sobre nuestro encuentro o no, o quizá ni él/ella ni yo le diremos nada a nadie, tenemos un secreto. Tengo un secreto con un escarabajo diminuto.




A s í .

M e     c o n v u l s i o n a     t a n t o    s u r r e a l i z a r m e    d e   e s e     m o d o     e n    e s e

 m e d i o .   L e    p e r t e n e z c o   a l   a s a l t o   y   a l    v i e n t o .

  M e   d e s c u b r i e r o n.


N i     t o d a s     l a s    o n o m a t o p e y a s    d e l     m u n d o    p o d r í a n    d e s c r i b i r    e l       s o n i d o    q u e     h a c e     e l     n a c i m i e n t o     d e     u n a      i d e a .



Péndulo de mierda.

Ese reloj está desintegrado al tiempo.
Por qué lo apuñala en repiqueteos?
Dile que cese! No ve que lo está lastimando?
Insiste e insiste, está construyendo encima del tiempo, taladrando, excavando con su máquina, lo está arrastrando.
¿Qué es ese otro ruido? Oh... no pude buscarlo, se ha ido.
El sonido del reloj ahora está más fuerte ¿qué pretende? ¿Asesinarme a mí también?


Voulez-vous coucher avec moi?





And it is now my duty to completely drain YOU.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Suelo

¿ Las preguntas, tu símbolo, el trazo, sustantivo cuneiforme de oraciones múltiples que hace de nuestra patria una nación independiente, humana y generosa a la que entregamos nuestra existencia. El folio en rojo, las notas en las que describe el desgaste y la garantía después de habernos comprado. Colores sin sinestesia son burocracia. Este ente alrededor de mi cuello disléxico, contorno de mi cara y de mi forma de narrar. Infinito pordiosero.

Las vibraciones Ay! el intermedio, interrupción— ellas, me refiero a ellas, las trágicas condenas del principio vital que explotan y sienten, que planean y se secan, en las manos, en la carne en tus uñas, al imitar desniveles ajenos. Inconsciencia, rugido. No llegan, no llegan, pero el relajamiento y el ser se disuelve, y no trasciende, ni es relevante. Otredad, tú qué.Risas, dismorfias, las escaleras miran de reojo y te entierran sus grecas en los piies de por sí ardientes. No mires, mandíbulas lepidópteras, monstruosas, vloadores y suavecitas, que no mires te he dicho!

Un medio de reproducción parelelo al cielo, la intermitencia de carácter plurinominal, sí quiere trabajar. Hoy será la boca de Mina quien me atraviese, quien me viese, quien me bese. El cardio en la censura, invisible estatua de Saphos almacenador de muchas cajas, es la misma. 


martes, 19 de junio de 2012

Nyan, nyan, dormir.

Este es el lugar más bello, con mis amigas las sobras y la desesperación. Es horrible calmarse y encontrarse pausado y ya no saber qué hacer en la oscuridad, menos cuántos loops al escribir. No veo nada y es precioso, debería cerrar los ojos también, incluso podría sonreir, y recordar todos esos lados y las cosas planas que se amoldan en las cosas redondas. Y todo se consume; y esto es estúpido, quiero subirle a la música. Aunque creo que me gusta así y qué bueno que no te veo, porque odiaría tus renglones grasosos.

Ni recuerdo el principio, sólo sé que siempre hablo desde mí y no sobre lo espacioso y flotante de la levitación intrínseca de no saber utilizar la palabra intrínseco. Gracioso que la luz parece buscarme, y yo sólo le respondo con dolor de cuello descriptivo. Algo burbujea y se muere.

No sé dónde está todo esto pero quiero hablar de los.
Acá detrás de la horrible pantalla, él ondea y se parte pero se enmudece con la hiedra que se trepa a sus incrustaciones raquíticas y espolvorosas, sus canicas nos besan a todos la piel y es como copartir la arena y todo eso bajamos poco a poco la evasión invasiva y no queremos olvidarlo ni queremos sacar frases luminosas, para eso están las tiendas y el dolor en los traseros.
Sobras y expansiones no sé qué tanto sobran o qué tanto se expanden, todos lo saben y lo dicen cuando pueden porque el formato debe llenarse o si no todos conocerán su propio líquido cefalorraquídeo.

Luz abductiva.

Nadie y todos deberían dormir aquí.
Las pequeñas gomas se sumergen y juegan a los buzos malolientes y aún así no descartan la posibilidad de incendiarse para buscar las ciruelas inquebrantables y sabias. Por más que su naturaleza topo los hace estrellarse y revolverse.
Las nubes desayunan los ojos tristes.

Eso pasa por agacharse demasiado, pronto empezará  a ver los escarabajos mielosos por la ventana.

lunes, 6 de febrero de 2012

Allá


Curva torcida como carretera, igual de andante y deseosa de incrustar su blancura en las cuencas de mis ojos. Conmigo el mareo y el rompimiento, el desvanecimiento de los otros, todos en el balanceo, todos esperando. 

Yo que sólo busco mi tierra, mi lugar no reconocido, mis pies y mis sonrisas, las vibraciones de mi ansiedad, de mi emoción, de mis ganas de correr y tirarme al suelo. Mis gritos. Tú, y tus giros de metal, tus iconos falsos y tu cabello real. La gente muda desesperada pero sonriente. Más y más chocolates. Destiempo.

Olor costero imaginario, las gaviotas y su excremento fantasma, y aquel joven underground que nadie puede leer, todos los sujetos que pueden caber aquí, todos míos y yo sin saberlos. Absórbeme ya, bello río de las calles Quay. Aliméntame ya, fichita de diez euros por persona, que me lleno de tu 'qué bonita Navidad' y paso sentada el trascurrir de mis procesos de humano.

Viento enfermo, tú fórjame y tergivérsame  a tu manera, allá con las hojas naranjas y mi suelo verde, en el despojo de mi ropa de invierno, en el placer de mis manos entumidas que te abrazan. Aquí en mis ojos cerrados.

Todos nos ocultamos detrás de mi libro en blanco inmortal, de los ojos pantano, de Lucas y los que también se saben aquí. El Phoenix que se aprovecha de mi dispersión, de la casa ajena perdida, de la transparencia del suelo. Obelisco y mapa.

Allá dormimos las nubes, acá una sombra para comer. El anglosajón seducido por los que son como nosotros. Una huída. Una taxi con brazos que toca el timbre, dobla mi cuerpo y me guarda. Y yo te guardo a ti, Éire, aquí en los bolsillos de la playa impermeable que sólo tú y yo vimos, la estampa tuya, los encerrados en la torre de puntas, la cara de cementerio, las uñas que te conservan.

 Acá cerquita me va sintiendo, me va tocando, me quiere.





jueves, 26 de enero de 2012

Por ahí dicen que los títulos deben contener, pero yo quiero manchar las paredes, ya dejé todo negro rojizo, en algunas partes más rojo negruzco, mis huellas son inconfundibles, no hay otras más espumosas. Tengo que encender mi vela gelatinosa, TENGO que encenderla antes de que mis ganas de hacerlo la lancen por la ventana, me gusta mi vela. Tómame en el té de la literalidad, vengo en bolsitas a veces, también.

I'm a frrreakin' lovecat.